Euclides Tapia, catedrático en Relaciones Internacionales de la Universidad de Panamá, nos ofrece su análisis sobre el Tratado de Neutralidad, su relevancia en la actualidad y las posibles implicaciones de las enmiendas que afectan al Canal de Panamá.
También garantiza el libre tránsito por el canal, aunque en la práctica existen prerrogativas para Estados Unidos que ponen en duda su verdadera neutralidad. Además, el tratado tiene un componente administrativo y económico que permite a EE.UU. cierto nivel de injerencia en la gestión del canal.
¿Cuál es la enmienda vigente?
Las enmiendas más relevantes son la DeConcini y la de Church, expresó el catedrático. La enmienda DeConcini establece condiciones bajo las cuales EE.UU. podría intervenir para mantener el canal abierto, específicamente en situaciones de emergencia, como ataques terroristas o paros laborales.
Sin embargo, el peligro radica en el entendimiento adicional al artículo 4 del Tratado de Neutralidad, que le otorga a EE.UU. la posibilidad de usar recursos, incluyendo la fuerza, para resolver cualquier amenaza a la seguridad del canal, mencionó.
¿Cuál es el peligro que representa este entendimiento?
El verdadero peligro es que EE.UU. podría declarar una amenaza a la seguridad del canal y justificar su intervención, lo que podría poner en riesgo la soberanía de Panamá.
Aunque la enmienda DeConcini está más orientada a mantener el canal operativo, el artículo 4 permite la intervención de EE.UU. bajo un régimen de neutralidad que podría ser fácilmente interpretado de manera unilateral.
¿Quién puede declarar la violación del Tratado de Neutralidad?
Tapia manifestó que, cualquier parte firmante del tratado, ya sea Panamá o Estados Unidos, puede declarar la violación de la neutralidad de forma unilateral. Otros países adheridos pueden expresar su opinión, pero su influencia se limita a los objetivos del tratado.
¿Qué ocurriría si el Senado de EE.UU. decidiera renegociar o cancelar el Tratado de Neutralidad?
Una resolución del Senado de EE.UU. no obliga automáticamente a Panamá a salir del tratado. Sin embargo, si no se cumple con el tratado, esto podría generar un impasse que llevaría a una discusión sobre la validez legal del acuerdo. Además, algunos sectores en EE.UU. han planteado la posibilidad de coadministrar el canal con Panamá, lo cual, según Tapia, sería una propuesta fuera de lugar y podría generar tensiones adicionales.